Pronóstico oscuro

El equipo está distraído y eso incluye al cuerpo técnico. La selección no vive, ni cerca, uno de sus mejores momentos y en la cancha se percibe. En Dinamarca se compitió bien medio tiempo y después al recibir un gol la escuadra se desvaneció de forma alarmante. El portero se mantiene como la máxima figura de un cuadro con severas dudas defensivas y por el momento con muy poco gol.

El disparo de media distancia no sobra, pero hasta el momento es la única arma medianamente visible que se podría utilizar mientras no se logre habilitar al nueve en cuestión.

Las estadísticas resientes de Alemania indican que no viene bien, pero si vamos a ésas, es mucho más sencillo que los germanos tuerzan la historia a su favor, a que lo haga, hasta el momento, la endeble y dubitativa presencia azteca.

El tiempo se acabó y mientras se ruega para que algunos de los intocables recuperen su mejor versión; México como en tantas otras ocasiones vivirá al límite de la cornisa su debut mundialista en el campo emblemático del balompié ruso y contra el campeón del mundo. Nada pinta bien. Porque a menos que haya un milagro futbolístico o un accidente de esos que suceden una vez en la vida, el pronóstico en Moscú para el día 17 es tormenta constante durante 90 minutos y lo que agregue el árbitro.