Opinión

Christian Martinoli

Uno de los mejores cronistas deportivos en México, trabaja para TV Azteca y ha colaborado con RÉCORD desde 2010.

Economías

2021-02-11 | CHRISTIAN MARTINOLI
CHRISTIAN MARTINOLI
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Manuel Neuer, uno de los mejores porteros en la historia del futbol alemán, fue benévolo al decir que en la Liga MX no se está acostumbrado a jugar al ritmo con el que desarrolla su juego el Bayern Munich y no, no es necesario que el arquero del club bávaro haya tenido que ver en su vida un solo partido de nuestro certamen, porque al final hasta corto se quedó, ya que quizás únicamente en la Premier League de Inglaterra se juega a velocidad y precisión similares como lo hacen los equipos en la Bundesliga, un torneo de alta gama donde las pausas son mínimas, el engaño al árbitro es mal visto, los equipos no especulan y el espectáculo es casi garantizado.

Neuer, campeón del mundo y un portento físico, táctico y técnico en su posición, también es consciente de que los juegos a veces tienen ciertas sorpresas y él ya vivió una contra la Selección Mexicana de futbol hace más de dos años en Moscú. Recuerdos, claro está; no obstante, sabe que cualquier descuido o un mal día colectivo podría darles un susto frente a Tigres.

Que el monarca de la Champions sea favorito en un torneo como éste es lógico y previsible. Europa tiene el dinero para comprar lo mejor del mundo y sus principales cinco Ligas sostienen el negocio global de este juego. Macabro y polarizador sí lo es, pero este juego que desde hace mucho tiempo dictaminó las reglas del negocio y por el momento incluso con pandemia de por medio no se vislumbra un cambio de formato muy cercano.

En una escala proporcional, Tigres y otros tres equipos más de la Liga MX aplican las políticas de mercado que rigen al futbol de alto calibre y en nuestros estándares son compradores de lo mejor disponible para la zona y así han incrementado sus oportunidades de trascendencia futbolística. Que nadie se asuste, el futbol romántico cada día está más en desuso y el dinero es la llave más fácil en busca de protagonismo.

Lo hacen los gigantes de Europa, lo hacen los millonarios de México. Cada quien con sus medidas y estándares, pero su formato es similar. El asunto es que si el Bayern gana desde hace 50 años 70 por ciento de los torneos de su Liga, no es que cada fin de semana sea un paseo por el Danubio, es que sus rivales tienen un nivel competitivo bastante elevado a diferencia de lo que sucede en otros torneos, incluso similares a la Bundesliga.

Ya que hablamos de dinero, salvo el Arminia Bielefeld, los otros 17 equipos de la Primera División alemana están en valor de plantilla por encima de los Tigres y de cualquier otro equipo del futbol mexicano.

Son simples números, pero eso nos habla de que uno de los acaudalados cuadros de México tiene casi el mismo valor económico el más endeble de finanzas en aquel país. No dice nada, pero puede decir mucho.

En 90 minutos con una pelota en movimiento en algunas lindas ocasiones la distancias monetarias se esfuman, lo sabe el Bayern, pero también lo sabe Tigres, porque en México ha llegado a perder contra equipos a los que les saca cuatro o cinco veces el valor de su plantilla. Veremos qué pasa en Qatar, de todas formas a estas alturas y antes de jugar el partido, Tigres ya ganó, aunque pierda.

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