Opinión

Luis García

El Doctor une el amplio conocimiento deportivo con un estilo propio. Sus geniales comentarios que lo han hecho referente de la TV tienen también su lugar en nuestro diario.

Discordante

2018-03-02 | LUIS GARCÍA
LUIS GARCÍA
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Rodolfo Pizarro desde hace algunas semanas te espabilaste y en serio, en un salubre ejercicio de conciencia tomaste la valiente decisión de erguirte en el mandamás de tu equipo.

Aspecto sumamente plausible dado el precario momento por el cual atraviesan, si bien es cierto han jugado mucho mejor de lo que sus números señalan, la actual situación de la entidad es delicada.

Es por ello que tu arrojo, tu locura y tu determinación de abrazar el puesto de líder tiene mayor validez.

Con tu buen desempeño vuelves a demostrar que no eres de los típicos personajes que se mimetizan con los contextos, no eres de esos seres que si la cosa camina mal son arrastrados irreversiblemente al averno, y si la cosa camina bien lucen rozagantes.

No, tú no eres así, tú modificas tendencias, cosa nada común, tú comandas y remolcas conglomerados sin importar las circunstancias. Resulta una delicia observarte, quieres la pelota siempre, la pides una y mil veces, y tus compañeros te la hacen llegar sabedores que estás en un sublime estado de forma.

Has logrado mantener intacta tu natura, tu libertad, pero a tus alas y a tu magia las has provisto y fortalecido con grandes tintes de responsabilidad, estás comprometido con tu sentir y palpitar por el juego, pero también por las necesidades de tu gente y tu organización.

La cancha te está quedando corta para moverte, transitas con total holgura y clase por todas las zonas de la misma, cada partido dejas patente que no vas a permitir que se te enclaustre en algún paraje o que se te impongan rígidas rejas ni tareas, lo tuyo es volar sin rumbo fijo, lo tuyo es la improvisación, lo tuyo es crear sobre la marcha, lo tuyo es hilvanar arte en movimiento.

Tu peculiar festejo cuando anotas gol es una pequeña, pero contundente muestra de lo anterior, eres saleroso, no te inmuta el miedo al ridículo, eres un ente echado para adelante, sin traumas ni ataduras que te limiten.

Siendo lo más increíble es que acabas de cumplir apenas 24 años, en cuanto a temas de edad eres todavía un escuincle ‘caguengue’, pero en cuanto a solvencia y calidad luces como un adulto maduro y consolidado. Asumiste sin dolor ni angustia ser la figura de tu equipo, así fuiste contratado, ni más ni menos, y cuando se adentraron en el callejón más hosco, más obscuro, te acordaste del por qué te contrataron.

Lo hicieron para que fueras el divergente, el revolucionario, el que atenta contra lo establecido, pero no desde lo absurdo, no desde el escaño del volátil sin sentido, todo lo contrario, desde el trono con obligaciones
de ser el mayúsculo proveedor de soluciones.

Con tu dulce andar se abre el debate sobre tu posible inclusión en la lista final para Rusia 2018, la demarcación en la que podrías competir; en el entendido que a mi compadre Juan Carlos Osorio no le resulta tan medular, es el de media punta, detrás del centro delantero, pero también lo puedes hacer como interior por derecha o izquierda, incluso mucho más recargado a cualquier banda.

Desde mi trinchera creo que tú ofreces un repertorio de conductas y variantes que nadie puede empatar.

Tienes desequilibrio, ganas muchos de tus duelos individuales.

Manejas con enorme sabiduría los tiempos para irrumpir en el corazón del área sin marca. Eres un mediocampista que tiene gol, no te son indiferentes las redes enemigas.

Puedes ser un fabuloso asistente ya que tienes pase de gol y tiras muy buenos centros. Puedes conducir la pelota en largos tramos a máxima velocidad provocando severos contraataques.

Y por última, cuentas con una extraña y sensacional virtud, eres el mejor futbolista mexicano en la actualidad para recibir la pelota de espalda a la portería rival y girar sobre su propio eje en cualquiera de los dos sentidos poniéndose de frente como si de un acto circense se tratara.

Tu batería de monerías resultan seductoras para cualquiera, eres un anárquico con causa, un loco lindo, un gitano con agenda, estás convertido en una bestia que aplasta a sus oponentes con cadencia, habilidad, fiereza, velocidad y belleza, prescindir de tus servicios en la próxima Copa del Mundo me parece un despropósito.

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