'Sabía que el riesgo de fallar con Rafa era mínimo': Efraín Flores

El debutar a un jugador implica un riesgo para el entrenador que decida brindarle su primera oportunidad a un canterano; sin embargo, hace casi 22 años, Efraín Flores se sintió confiado de mandar al terreno de juego a un tal Rafael Márquez,  juvenil de 17 años que sobresalía por sus cualidades técnicas y liderazgo. 

“Sabía que el riesgo de fallar con él era mínimo. Le vi lo que le sigo viendo, su gran personalidad y liderazgo desde entonces. Sobre todo, su gran profesionalismo y su gran desarrollo deportivo que estaba por encima de cualquier otro jugador de su edad.

“Su técnica era sumamente buena, su capacidad táctica desde entonces era un lector del juego de una manera impresionante, que podía ser un técnico en la cancha, cumplía las indicaciones del entrenador y todavía tenía chance de cumplir otras. Esos son los rasgos que le veía cuando tenía 17 años y los que tiene ahora que tiene 39, por eso nunca dudé en ponerlo y debutarlo”, aseguró a RÉCORD el entrenador mexicano.

Efraín Flores aseguró que su decisión de alinear al Káiser ese 19 de octubre de 1996 contra Pumas fue un riesgo calculado, ya que se percató de la fortaleza mental del oriundo de Zamora, Michoacán.

“Cuando he sido entrenador le doy un seguimiento deportivo para saber cuándo pueden debutar, pero el seguimiento más fuerte se los doy en la parte humana. Reviso que estén preparados mentalmente, por si tienen una falla no se caigan o si hay algún acierto tampoco pierdan el piso. Creo que esa fue la cualidad más fuerte que le vi a Rafa para decir que ya estaba listo. Su actitud, su mentalidad, su personalidad iba a quedar intacta”, argumentó.

Flores Mercado recordó las palabras que le dijo al michoacano durante la semana previa a su debut e inclusive la charla que tuvo con el rojinegro un día antes de que comenzara su carrera profesional. 

“Durante la semana, el lunes que empezamos a trabajar con él, pensando que ya pudiera debutar, le dijimos que mostrara sus cualidades y que las desarrollara con la mejor naturalidad, que no se pusiera nervioso porque yo lo iba a respaldar aunque tuviera algún tropiezo.

“El día previo a debutarlo contra Pumas, lo único que le dije fue ‘cumple con tus tareas y disfruta mucho tu debut, le pido a Dios que te consolide’”, finalizó el timonel.