Opinión

Rudeza innecesaria en la Jornada 2

2018-01-16 | Felipe Ramos Rizo
FELIPE RAMOS RIZO
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¿Cómo va a mejorar el arbitraje mexicano si las charlas técnicas donde se analiza cada jornada son un verdadero zafarrancho? Los encargados del área técnica están en profunda crisis y cada semana salen regañados por los árbitros ante las pésimas decisiones que les piden tomen en los partidos, así ¿cómo van a mejorar?

La Jornada 2 estuvo saturada de violencia, protestas a los árbitros, fueras de juego inexistentes que influyeron en el marcador del partido y de árbitros incapaces que no saben cuidar a los jugadores hábiles, no hay control de faltas y existe mucha falta de respeto al árbitro.

El mejor silbante de la semana fue Luis Enrique Santander, con un trabajo sobrio con buenas decisiones arbitrales, le siguió César Ramos, que su único pecado fue no repetir el penalti de Pumas, pues ingresaron por lo menos ocho jugadores de ambos equipos al área.

Quien tuvo un desastroso debut con su gafete de FIFA fue Fernando Hernández, que nada más no sancionó dos claros penaltis a favor de las Chivas contra Cruz Azul y el que marcó su asistente le tuvo que decir para que lo sancionara, total que no dio una, eso pasa por entregarle el gafete prematuramente.

Fernando Guerrero, otro que anduvo de perdonavidas, Carlos Vargas y Andrés Uribe tenían que ser expulsados por parte de América, mientras que por Pachuca, Jorge ‘Burrito’ Hernández también se la merecía, le valió el partido, agregar el penalti que sancionó a favor de América en donde no existió falta, lo inventó.

Adonai Escobedo salió totalmente cambiado, no expulsó a Pablo Aguilar después de dar una patada descarada a un rival y cerraron anulando un gol legítimo al Necaxa que le daría el empate a un gol ante los Xoloitzcuintles del Club Tijuana con fuera de juego inexistente.

Por su parte, Jorge Pérez salió sintiéndose figura y le falta mucho para serlo, no expulsó a Aldo Rocha y Rodolfo Vilchis de Monarcas Morelia por patadas arteras y no sancionó un claro penalti sobre Raúl Ruidíaz, la conducción fue pésima, por eso recibió muchas protestas.

Otro partido donde las decisiones arbitrales influyeron fue en León contra Toluca, donde Erick Yair Miranda permitió que taparan a patadas a Rubens Sambueza y los jugadores de Toluca se ensartaron en gritarle y manotearle, pobre, no supo ni qué hacer, le anularon un gol a Toluca por un fuera de juego inexistente, influyendo totalmente en el marcador del partido, tendrán que darle un curso intensivo de cómo ubicarse porque estorba y le da la espalda al balón.

Sobre los árbitros Óscar Macías e Isaac Rojas, sinceramente no hay mucho que hablar de ellos, ya que no cambiarán su estilo de arbitraje que es muy probre y no aprenden.

Ante los malos arbitrajes, ahora todos piden el VAR, pero creo que antes de incorporarlo, la Federación Mexicana de Futbol y los directivos deberían preocuparse para que los árbitros estuvieran más preparados y capacitados; lo malo que no tienen quién lo haga, si no mejoran, el VAR será un rotundo fracaso porque estarán interviniendo tanto que la imagen del árbitro será exhibida y deteriorada, mucho cuidado. 

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