Opinión

David Faitelson

David Faitelson es dueño de un estilo duro, pero frontal al momento de dar opiniones, que incluso le han traído choques con algunas figuras.

¿Por qué? ¿Por qué, México?

2018-07-03 | David Faitelson
DAVID FAITELSON
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Cada cuatro años, por estas mismas fechas, escribo -más o menos- lo mismo: “El aficionado mexicano no tiene el futbol que en realidad merece…”.

Y seguirá sin tenerlo...

Por séptimo Mundial al hilo, México volvió a su tradicional y amarga noche que no le permite alcanzar el quinto partido.

Los sueños mexicanos de Rusia se esfumaron en medio de las clásicas reprimendas y frustraciones que significan la derrota. México fue superado técnica, física y mentalmente por un Brasil que no se esforzó al máximo. En el camino quedan muchas interrogantes, y la eterna, la de siempre, la que se ha repetido invariablemente en las últimas tres décadas: ¿Por qué, por qué, México?

Lo más sencillo sigue siendo enfocar la atención en los futbolistas, generación que se dio 'un lujo' que no se dieron otras: fracasar en tres Mundiales y que nunca alcanzó el éxito prometido o quizá concentrarnos en un DT que, por momentos, parecía perder un valioso tiempo rotando alineaciones y probando a jugadores fuera de su posición. 

El Mundial de México fue de más a menos y a mucho menos. El triunfo ante Alemania reubicó las expectativas que, al final, resultaron falsas. Alemania no era la Alemania que conocíamos y ante Corea del Sur se sufrió de más. Finalmente, apareció Suecia, donde se vino el desplome definitivo. Osorio decidió no alterar demasiado las alineaciones y pareció encontrar un cuadro base, pero cuando eso ocurrió, sus detractores decidieron criticarle porque había abandonado su polémico estilo. Y llegó Brasil, la ocasión que siempre tiene el futbol mexicano para -además de buscar el quinto partidomedir qué tan lejos o cerca están de las grandes potencias. El resultado fue el mismo de siempre.

En los últimos 28 años, México ha probado con distintos personajes en la cancha y en la banca, y el resultado fue siempre el mismo. Hay, sin embargo, un personaje común que se repite de fracaso en fracaso: Los dirigentes, los que toman decisiones, lo que no parece importarles demasiado porque para ellos la Selección y el futbol mexicano es un negocio. Mientras las cuentas sean claras y contundentes, lo demás les importa un reverendo 'cacahuate'.

En ellos habría que centrar la atención de un problema que se repite cada cuatro años. Las estructuras del futbol mexicano, de la Selección Nacional; las reglas de la Liga MX que no favorecen el desarrollo del futbolista; las fuerzas básicas; la exportación de jugadores hacia Ligas europeas; el proyecto de selecciones; quien decide al entrenador; el estilo de la Selección; los juegos de preparación; los objetivos. Todo eso termina acumulándose el día en que México se plantea pasar la imaginaria frontera del quinto partido.

Lo hemos hecho durante los últimos 7 Mundiales. La misma amargura, desesperación, olvido, caos, reflexión y coraje. Y la misma reflexión: el aficionado mexicano no tiene el futbol que en realidad merece. Hace tiempo que su pasión y su grandeza se fue por encima.

Nada cambiará mientras aquellos que toman las decisiones no quieran cambiar. Espero tener la fuerza y la salud para dentro de 4 años contar una historia distinta. Lo dudo mucho…

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