La exportación seguirá en grande

Uno de los grandes retos que tiene el futbol mexicano para alcanzar esa anhelada trascendencia en Mundiales es exportar más y mejores futbolistas a clubes europeos que les den competencia de alto nivel. Más calidad que cantidad.

Diego Lainez es un ejemplo de que se puede, si bien el Betis no es un club que acostumbre la parte alta de la tabla y menos competencias europeas, la Liga española aumentará el potencial del examericanista. Además, la venta que hizo el club de Coapa fue estupenda, no se marchó regalado.

Eso sí, Lainez no fue el mexicano más caro a Europa. Ése es Chucky Lozano, cuyo traspaso costó al menos 30 por ciento más que el americanista. Pero la venta de Diego mantiene una tendencia prometedora para nuestro futbol: un equipo del Viejo Continente hace un esfuerzo grande por uno de nuestros juveniles.

EL SIGUIENTE YA TIENE NOMBRE...

De una vez te adelanto, en el verano nos enteraremos de otro traspaso de buen nivel a Europa.

Edson Álvarez parece estar cerca, pero aún no existe la oferta que sea real, atractiva, para sacarlo del Nido; el supuesto interés del PSV por el americanista no llegó a Coapa. El Piojo Alvarado es otro que puede dar el salto. ¿El Cachorro Montes? También.

Hay varios candidatos, pero hoy te adelanto uno que ya tiene lugar en un club europeo, no milita en América o Chivas, sino en el club que se ha especializado en mandar talento al extranjero: Pachuca. El siguiente en emigrar es Víctor Guzmán. Otra buena venta. En el verano nos emocionaremos con su nueva aventura, otro paso del futbol mexicano para alcanzar esa anhelada trascendencia.